Argentina: "Somos muy diversos. Decimos los campos, los otros campos, la diversidad de los campos"

// Con el respeto que se merecen, compañeros, compañeras, compatriotas, quisiera identificarme, ¿por qué el compromiso por la causa del campesinado argentino?, ¿por qué el compromiso con la redistribución de la riqueza? Yo lo primero que me acuerdo, desde que tengo memoria, es cuando tenía 3 ó 4 años, que mi papá trabajaba la tierra con las manos. Esa es la primera imagen que tengo. Hoy mi papá tiene 63 años, y la imagen que tengo es la de un trabajador rural, un trabajador campesino agricultor, que trabaja la tierra con sus manos. Y cuando escarbo la raíz de mi origen, descubro que soy descendiente del indio guaraní y del español conquistador, y que cuando los españoles llegaron, mis antepasados cultivaban la tierra. Y a esa raíz pertenezco, y por eso somos parte del Frente Nacional Campesino aquellos que venimos, y que en nuestras venas corre sangre guaraní, y muchas otras etnias de esta América del Sur, y esta Argentina tan grande y tan generosa.

No descubrimos el campo ayer, con la soja transgénica. No señores, nuestra historia, nuestra vida, nuestra sangre, está ligada a la tierra, está ligada al campo, y cuando hablamos de campo, tenemos otra imagen, vemos a nuestros hermanos, a nuestros padres, a nuestros parientes, con una vida ligada a la tierra. Mi primer trabajo fue carpir y cosechar algodón a los cinco años, y entonces, el amor que uno siente por la tierra y por el otro campo, es absolutamente diferente a aquellos que dicen "el campo". Nosotros conocemos varios campos, los campos del Chaco húmedo, los campos del Chaco semiárido, los campos de la Quebrada de Humahuaca, los campos de la Puna, los campos de los valles, los campos de la pampa húmeda, los campos de la pampa árida, los campos de las mesetas, los campos de la precordillera, los campos de las costas del Atlántico, los campos del Litoral, los campos de Misiones. Es decir, que a nosotros no nos cabe el término de "el campo", con lo cual se quiere confundir a la población y a todos los argentinos, de que hay un solo campo, el de los terratenientes, el de los empresarios, y que hoy, por la gran rentabilidad han querido utilizar la soja transgénica como elemento de especulación, como elemento de colonización, como elemento de destrucción, y como elemento de expulsión de comunidades campesinas e indígenas.

No es fácil tratar de interpretar y de hablar en nombre del Frente Nacional Campesino, porque somos realmente muy diversos, históricamente, culturalmente, geográficamente en la Argentina. Somos muy diversos. Por lo tanto, decimos "los campos", "los otros campos", "la diversidad de los campos". Por supuesto que es campo también el yerbatero, pequeño productor, mediano, de Misiones, de Corrientes, que produce yerba mate y que consumimos todos los argentinos y en gran parte del mundo ya hoy. Cuando las 4 entidades tratan de hablar de "el campo" y defender los intereses, no están defendiendo esos intereses justamente. Están defendiendo solamente el de la acumulación, la especulación. Hoy los pequeños productores que arriendan su tierra, 120 ó 150 mil pesos solamente en concepto de alquiler de tierra, y eso es realmente obsceno, mientras que los yerbateros, algodoneros, arroceros, los fruticultores, citricultores, criadores de ovejas, de cabras, criadores de ganado vacuno, generalmente en este momento, 250 mil familias que atraviesan la pobreza, la miseria, 250 mil familias que muy a pesar de vivir en la pobreza, resistiendo, y compañeros y compañeras, quisiera que sepamos que estan bancando las retenciones a pesar de la pobreza y a pesar de la ausencia del Estado. Porque tenemos otro concepto de la tierra. Tenemos otro concepto de la producción. Tenemos otros objetivos más allá de solamente engordar el bolsillo y especular a invertir en el extranjero, y desangrar los recursos naturales de la Argentina, como la tierra, el agua, los nutrientes, que se están explotando y que no lo estamos cobrando.

Es miserable lo que nos queda a los argentinos a pesar de las retenciones si tuviéramos que sumar lo que se exporta, como agua, como nutrientes, como suelo, como minerales, y las retenciones es un primer paso positivo, no es suficiente. Las retenciones solamente le rozan el bolsillo a estos grandes empresarios. Solamente le rozan y se arma semejante escándalo, se arma semejante complot, y se está conspirando contra un gobierno democrático elegido por el pueblo, les guste o no les guste fue elegido por la mayoría. Y hoy las 4 entidades, las multinacionales cerealeras, y sus aliados, las corporaciones de medios de comunicación, lo que en realidad reclaman ya no es solamente las retenciones, es un problema de fondo político, es un problema de modelo de país, es un problema de modelo de campo lo que está en disputa. Y esto es muy serio, por eso es necesario el compromiso de todos los argentinos, de la mayoría de los argentinos mejor dicho. Porque lo que está en juego no es solamente las retenciones. Las retenciones hoy es la excusa perfecta que eligieron para poder atacar a la democracia, para poder atacar a un gobierno electo, y para poder ir por mucho más. Se van por toda nuestra tierra, se van por todas nuestras aguas, y si logran derogar la 125, también pretenden que no se cobre retenciones a la exportación de petróleo, y a la exportación minera, y demás. Es el primer paso que ellos pretenden.

Por lo tanto, compañeros, compañeras, compatriotas, hombres, mujeres, es imprescindible que el Senado apruebe tal como se presentó, como fue aprobado por la media sanción de la Cámara de Diputados. Ya sabemos que hay un gran número de traidores a la patria en el Senado y en la Cámara de Diputados, pero no podemos permitir que sigan avanzando. Es nuestro deber, para los kirchneristas, para los no kirchneristas, para el campo popular, para los movimientos sociales, para los movimientos campesinos, para los movimientos indígenas, para las fuerzas progresistas y populares, para los organismos, para los sindicatos, para los barriales, poner freno a esta derecha golpista, a esta derecha reaccionaria, a esta derecha que tiene la mano manchada con sangre de nuestros compatriotas.

Porque el pueblo siempre puso el cuerpo. Nuestros campesinos tuvieron que dejar varias veces en la historia el mango del arado, para tomar un fusil y defender la patria. Y las veces que tuvimos que ponder nuestras vidas también la pusimos. Y la derecha está comprometida con los golpes, con las conspiraciones, con la destrucción de los recursos, con la expoliación. Yo los llamo a estos señores de las cuatro entidades, los herederos de Julio A. Roca, y creo yo realmente que continúan con la campaña que ellos denominan "campaña al desierto". Hoy con la soja ellos expulsan familias, queman ranchos, mandan topadoras, compran policías, compran jueces, compran dirigentes políticos, compran diputados, compran senadores. Es mucho lo que está en juego, por eso no nos podemos dar el lujo nosotros de, en este momento, ser mezquinos, resaltar las críticas, las diferencias, las diferencias entre nosotros tenemos que dejar para otro momento. Hoy tenemos que entre todos poner freno, tenemos que movilizar, tenemos que organizarnos mejor, organizarnos mucho mejor. Esta gente viene por más. Si en el Senado logramos que se vote esta resolución, tal vez recurran a la Corte Suprema, tal vez pidan plebiscito, van a recurrir a todos los medios. Y sabemos que existen fuerzas e intereses trasnacionales y extranjeros detrás de todo esto. Nosotros elegimos la soberanía y la independencia, y en este día muy importante, 9 de julio, la pregunta que tenemos que hacer todo buen patriota, es ¿qué pensaría, que haría don José de San Martín, qué haría el General Belgrano, que haría el General Güemes?, nuestros patriotas comprometidos con la independencia.

Supongo que esos diputados y senadores que dicen ser patriotas también, si tuvieran que escuchar la voz de Güemes, no le estaría pidiendo con el poncho colorado puesto, "che, no voten a favor de la 125, para que podamos producir más soja", no creo. San Martín no diría "maten a esos indígenas y quemen a esos campesinos, quítenle la tierra y métanle soja", no lo creo realmente. Sí sabemos de ellos, que impulsaron las primeras ideas de reforma agraria. De Belgrano, de San Martín, de Güemes, de Artigas. Hay que mirarse en esos hombres, ¿qué es hoy ser patriota? Ponerse la escarapela no significa ser patriota. Conocemos a mucha gente que se pone la escarapela y son los peores traidores, que hoy están desalojando. ¿Quieren que les cuente un ejemplo? Hay un dirigente rural, vicepresidente de la CRA, que ustedes ya lo conocen, que si la ley no sale como el pretende, propone que se disuelva el Congreso, golpe de estado. Ricardo Buryaile se llama. Es mi vecino y es formoseño, mal nacido, sí es verdad. Este dirigente ruralista, heredero de Julio A. Roca, que el campo que hoy el ostenta, varios miles de hectáreas, consiguió el título de propiedad en el año '79, no se si les suena ese año. Y la donación que le hizo su abuelo supuestamente, se la hizo en el año '82, año que por ahí les suena o significa algo, años en los que las Ligas Agrarias fueron aniquiladas, en los que nuestros dirigentes rurales, campesinos e indígenas eran llevados presos, torturados y matados, como muchos dirigentes sociales, políticos, religiosos y estudiantiles. Este hombre en esos años, que a nosotros nos daban garrote de plomo, aseguraban las tierras. Más en Formosa, con un interventor del Instituto de Colonización y Tierras Fiscales, que fue el Coronel López, que con la topadora atropellaba los ranchos, destruía los alambrados, quemaba, y así los actuales terranientes se hicieron de tierras.

Este dirigente está llevando adelante un juicio de desalojo contra sus primos hermanos, doce familias, son parientes. Estos paisanos nuestros, hace más de 45 años que viven, trabajan y cultivan esas tierras. Él los quiere desalojar porque a él le queda bien para encuadrar el campo. Y ya tiene el título de propiedad privada. Así actúan los dirigentes de la Sociedad Rural, así actúan los dirigentes de la CRA, así actúan los dirigentes de esta Federación Agraria traidora a los Gritos de Alcorta.

Compatriotas, agradecemos como Frente Nacional Campesino la invitación, este espacio compartido, esta presencia, este acompañamiento, este apoyo. Al mismo tiempo, queremos invitar a que pongamos todas las energías que tengamos como organizaciones, todas las fuerzas, toda la inteligencia, como primer paso, compañeros, compañeras, en frenar a esta derecha reaccionaria y golpista. Hay que frenarlos ahora también en Senadores. Si tenemos que movilizar no tenemos que mezquinar esfuerzos para movilizar y ponerle freno. A este De Angelis, caradura, mentiroso, traidor a la causa, tenemos que poner freno. Nuestras diferencias tenemos que dejar para después, y después en lo inmediato, en el corto plazo, es imprescindible discutir una política de desarrollo rural sustentable integral, como país, como Estado. Es imprescindible. Llegó el momento. No podemos seguir esperando. Este país tiene que planificar la producción. Tiene que diversificar la producción. Tiene que industrializar la producción en los lugares donde se produce. Tiene que garantizar la alimentación para todos los argentinos, para todos. No es posible que siga existiendo hambre. Es cuestión de distribución simplemente.

Conquistamos esto que hoy tenemos. Tenemos que ir por más. Tenemos que seguir exportando, pero exportando agroalimentos, no solamente soja transgénica. Pero no exportar en el estado primario, tenemos que exportar con valor agregado. Sabemos que existe voluntad política. Sabemos que existe capacidad científica. Sabemos que existen programas, dirigentes sociales, campesinos, técnicos, instituciones del Estado dispuestas a trabajar en esta línea. Es el momento en que nos encontremos más allá de nuestras diferencias y podamos trabajar por una política de desarrollo rural integral como argentinos. Las retenciones es un paso hacia esta planificación de la producción. Con la planificación de la producción, con la industrialización, se puede terminar con la desocupación. Agroindustria no puede ser solamente construir sembradoras directas de 500 mil dólares. Eso es una parte. Agroindustria es mucho más que eso, mucho más. Y con la agroindustria, los argentinos, podemos terminar con la desocupación. Es posible, es real. No estamos lejos, pero tenemos que empujar todos juntos este carro. Tenemos que tirar todos juntos. Con todo respeto, simplemente eso. Tenemos que ganar esta batalla, es una batalla, la guerra continúa, para que algún día exista igualdad de posibilidades, inclusión social, país serio y democracia realmente profunda y participativa. Muchísimas gracias, la participación de todos y cada uno es muy importante. Todos somos importantes, ningunos somos imprescindibles.

Buenos Aires, 9 de julio de 2008. Plaza del Congreso de la Nación.

Por Raquel Schrott y Ezequiel Miodownik, para la moc.liamg@aldoibaicnega

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