Ecuador: El Estado controlará el uso del agua, la tierra y las semillas
El informe definitivo de soberanía alimentaria, listo para su aprobación final. Se plantea un control estatal de tres sectores: agua, la tierra y las semillas
Redacción Política
Tres temas cruciales dentro de la sección de soberanía alimentaria se incluirán en la nueva Carta Política que será sometida a referéndum.
Declarar al Ecuador como país libre de cultivos y semillas transgénicas, prohibir el acaparamiento y privatización del agua e impedir el latifundio son los aspectos fundamentales del texto definitivo que será sometido a votación en los próximos días.
Eso ocurre una vez que la subcomisión de la Mesa 6 de Trabajo entregó el documento final, en el que se incluyeron las observaciones realizadas en el segundo debate del pasado 24 de junio.
Esa subcomisión estuvo conformada por el titular de la Mesa 6 Pedro de la Cruz, Guillermo Touma (ambos de Acuerdo País) y Abel Ávila (MPD).
El documento tiene tres artículos y cuatro disposiciones transitorias. Entre estas últimas, se contempla la creación de un Fondo Nacional de Tierras para garantizar el acceso equitativo a los recursos productivos y la erradicación de la pobreza rural.
Las competencias y formas de gestión de este Fondo serán reguladas mediante una ley.
De la Cruz aclara que en ningún caso implica atentar contra la propiedad privada y recuerda que los artículos fueron aprobados en segundo y definitivo debate en la sesión del jueves anterior. Ahí se aprobó que el Estado “reconoce y garantiza el derecho a la propiedad, en sus diversas formas: pública, privada, comunitaria, estatal, asociativa, cooperativa, mixta. Siempre deberá cumplir su función social y ambiental”.
El asambleísta, quien es también dirigente de la Fenocín, dice que el objetivo es declarar a la soberanía alimentaria como objetivo estratégico de la sociedad.
Eso es lo que refleja el articulo que indica que “el Estado está obligado a tomar las medidas necesarias para erradicar la pobreza rural garantizando a través de políticas redistributivas el acceso de los campesinos al agua, a la propiedad de la tierra y más recursos productivos”.
El asambleísta de minoría Pablo Lucio Paredes (Futuro Ya) calificó de “pésimos” a los artículos de esta sección y denunció que están orientados a fortalecer solo un segmento del mercado excluyendo a los sectores grandes.
Cuestionó también que estos textos están orientados a centralizar el tema en el Estado asumiendo que es eficiente y eso no es así.
¿Qué pasaría si el Estado no puede garantizar el acceso al agua y este articulado prohíbe privatizar este recurso?, se preguntó.
El segundo artículo relacionado con soberanía alimentaria contiene 17 numerales en los que se incluyen aspectos como que el Estado regulará bajo normas de bioseguridad el uso y el desarrollo de la biotecnología, así como su experimentación y uso.
La cuarta transitoria por ejemplo señala que el Estado revisará la actual situación de acceso al agua de riego con el fin de reorganizar el otorgamiento de las concesiones, el abuso y las inequidades en las tarifas de este recurso para garantizar una distribución más equitativa del agua de riego y el acceso especialmente de los pequeños y medianos productores agropecuarios a este derecho.
Irina Cabezas, vicepresidenta de la Mesa 6, aclara que la nueva Constitución no habla de productos que contengan transgénicos sino únicamente de las semillas y los cultivos.