Colombia: multitudinaria asistencia a la Audiencia Pública sobre Agro-combustibles en el Municipio de Pradera-Valle del Cauca

En el desarrollo del evento se pudieron escuchar los testimonios de la explotación bárbara que sufren los trabajadores de los Ingenios quienes no cuentan con seguridad social en un trabajo de alto riesgo en el que muchas veces quedan incapacitados desde temprana edad, todo a cambio de un irrisorio salario contra la acreditación de toneladas de caña cortadas para enriquecer a los dueños de los Ingenios.

Los trabajadores no tienen ningún control sobre las básculas de pesaje de la caña que cortan, por lo que nunca saben si están recibiendo el pago correspondiente a su trabajo diario, son sometidos a un modelo de contratación que afecta gravemente sus derechos laborales bajo la figura de las cooperativas asociadas de trabajo en el que ellos mismos deben asumir el pago de sus prestaciones y seguridad social. Como si esto fuera poco reciben un trato displicente por parte de las empresas prestadoras de salud, administradoras de riesgos profesionales y de pensiones de la región, que de manera cínica se niegan a reconocer como enfermedades laborales, las afecciones que sobre la salud de los trabajadores producen las extenuantes jornadas de trabajo, que pueden ir hasta las 16 horas diarias, en el corte de la caña. Tampoco les son reconocidas las pensiones de invalidez cuando por esta misma razón quedan paralizados debido a recurrentes enfermedades articulares y musculares producidas por el constante ejercicio del corte.

También se escucho la denuncia de una de las compañeras de los cañeros quien se dirigió a la audiencia en nombre de todas las que como ella deben asumir una fuerte carga de trabajo familiar, levantándose diariamente a las tres de la mañana para preparar los escasos alimentos que sus esposos deben llevar para soportar la larga jornada laboral de la que no regresan antes de las nueve de la noche, y sin embargo, añadió, al terminar la quincena, el salario que a ellos les entregan no alcanza para que "nuestros hijos puedan comer, ni siquiera para que puedan saborear un helado en un parque, cualquier domingo o día de fiesta".

La Audiencia sufrio de varios aplazamientos por causa de los ingenios azucareros quienes hicieron todo lo posible por impedir que se efectuara. A ello se sumó la militarización de la zona por parte de la fuerza pública y el chantaje y la amenaza personal a los trabajadores y a quienes colaboraron con el trasporte.

Lo más importante de la convocatoria fue la presencia de organizaciones sociales representativas de comunidades indígenas, negras, campesinas, sindicales, de los trabajadores del Puerto de Buenaventura, de viviendistas, de usuarios de servicios públicos, de derechos Humanos y en fin de todo el amplio mundo de la resistencia social. Las Cooperativas de Trabajo Asociado de los corteros y piqueros de caña que cuentan con aproximadamente 20.000 afiliados llevaron la iniciativa en la organización de esta audiencia y garantizaron la presencia de un número considerable de sus afiliados.

La audiencia sirvió para denunciar igualmente que el monocultivo de la caña desertifica el departamento, no solo porque erosiona la tierra sino porque los ingenios están utilizando en el riego la mayor parte de las fuentes hídricas del mismo. También se denunció que este monocultivo que hora, con subsidios del Estado, viene adecuándose a la producción de alcohol carburante, atenta en contra de la soberanía alimentaria, hace parte de una estrategia internacional de grandes capitalistas rurales de utilizar territorio que potencialmente sirve a la obtención de alimentos, en la producción de combustibles sustitutos a los hidrocarburos. En Colombia ello hace parte de la estrategia de desarrollo de largo plazo del gobierno nacional definida en el denominado plan presidencial "Colombia 2019" como el objetivo principal a implementar en el campo.

Lo más importante de la audiencia fue que logró comprobar el empoderamiento de las comunidades locales y de los trabajadores frente a los problemas que los aquejan y que este empoderamiento está avanzando hacia una alianza de trabajadores, negros e indígenas de la región en contra de un monocultivo depredador. Por ello la consigna de "paro nacional de los corteros y piqueros de la caña!" fue consensuada y aplaudida con entusiasmo por todos los asistentes.

Por ello estamos convencidos de que los trabajadores y el pueblo en general pueden encontrar por sí mismos soluciones a sus enormes problemas, el éxito de esta audiencia es un argumento adicional para seguir acompañando las jornadas que se avecinan hacia la construcción de un proceso organizativo de reivindicación de los derechos de los trabajadores y de las comunidades de esta región del país.

Paula Alvarez
Grupo semillas