Las ONG acosan a los biocombustibles en el Convenio de Biodiversidad
La novena reunión de la Conferencia de las Partes del Convenio de Biodiversidad, que se celebra estos días en Bonn, está sirviendo de escaparate para que las ONG cuestionen el desarrollo de los biocarburantes mediante diversos informes. Uno de ellos los sitúa como segunda causa de la destrucción de los bosques en Latinoamérica
En los días previos a la reunión del Convenio de Biodiversidad, más de 140 ONG agrupadas en torno a la asociación CBD Alliance han elaborado un manifiesto en el que se incluyen los aspectos más urgentes a tratar durante la cumbre. En primer lugar aparecen los biocarburantes, calificados como una de las tres falsas soluciones que intentan mitigar nuestro efecto sobre el planeta.
“Los combustibles agroindustriales son una seria y creciente amenaza a la biodiversidad, requieren de monocultivos e infraestructura masivas y son una solución falsa al cambio climático, instaurada por la industria a través de incentivos perversos, consolidando su control sobre la agricultura”. La Fundación IPADE (Instituto de Promoción y Apoyo al Desarrollo), la ONG española representada en CBD Alliance, ha dado a conocer estos puntos, que son aún más críticos cuando afirman que “los combustibles agroindustriales de cualquier generación nunca podrán ser sustentables y su expansión inevitablemente conducirá a la pérdida de biodiversidad. Por eso, llamamos a una prohibición inmediata de los planes globales de producción industrial de agrocombustibles”.
Los segundos máximos destructores de los bosques Los árboles genéticamente modificados (con algunos se investiga como posible materia prima para biocombustibles de segunda generación) y “los remedios tecnológicos al caos climático” (créditos y captura artificial de carbono) son otras de las “falsas soluciones” a las que hace referencia el manifiesto de CBD Aliance.
Por otro lado, otra asociación, la Global Forest Coalition, presentó en el mismo foro un informe sobre la situación de los bosques en Latinoamérica en el que se afirma que los biocombustibles son la segunda causa de deforestación. Solo se ven superados por la extensión de pastos para la ganadería y están por delante de los cultivos destinados a la alimentación humana.
Además, según declaraciones a EFE del presidente de Global Forest Coalition, Miguel Lovera, "el uso de los biocombustibles permite reducir las cuotas de emisiones de los países industrializados, pero dispara las de las naciones en vías en desarrollo y el dióxido de carbono termina en la atmósfera igualmente".
El informe, que analiza, entre otros, la situación de los bosques de México, Paraguay, Costa Rica, Ecuador y Brasil, confirma que en algunos estados de este último país se ha duplicado el ritmo de deforestación en el primer trimestre del año, con respecto al mismo periodo del año anterior. Esta es una de las razones por las que ha dimitido la ministra brasileña de Medio Ambiente, Marina Silva, una de las principales defensoras de la Amazonía.