Relator especial subraya que la crisis alimentaria no es un desastre natural
El relator especial de la ONU para el derecho a la Alimentación, Olivier De Schutter, hizo hincapié hoy en que la actual crisis alimentaria mundial no es un desastre natural sino una violación de los derechos humanos
El profesor belga intervino hoy ante la sesión especial que celebra el Consejo de Derechos Humanos para abordar la crisis provocada por el alza de los precios de los alimentos.
De Schutter, que sustituyó en el puesto de relator hace sólo tres semanas al sociólogo suizo Jean Ziegler, dijo que los estados deben enviar el mensaje de que 'la crisis global de los alimentos no debe tratarse como un desastre contra el que nada puede hacerse, sino como una amenaza masiva al derecho a una alimentación adecuada para millones de individuos'.
El relator pasó revista a las principales causas que, en su opinión, han provocado la grave crisis y que, según la ONU, agravará las condiciones de vida de unos 854 millones de personas que se encuentran en situación de inseguridad alimentaria en el mundo.
El 60 por ciento de ellas están en el Africa subsahariana y en el Sur de Asia, y a ellas hay que sumar 2.000 millones de personas que sufren de malnutrición debido a carencias de vitaminas y minerales.
El relator culpó a 'las políticas que se están poniendo en práctica actualmente', entre ellas los acuerdos de comercio 'legitimados por la OMC' que golpean a la agricultura de los países en desarrollo con los subsidios que reciben los productores del Norte.
'Requiere urgente atención el asunto de garantizar el acceso a semillas y fertilizantes (especialmente en la región subsahariana) antes de que termine la temporada de siembra en junio', subrayó.
Pero agregó que 'debido al efecto combinado del brusco aumento de los precios del petróleo y de la protección de los derechos de la propiedad intelectual de los productores de semillas, fertilizantes y pesticidas, los precios de éstos se han disparado, y mientras los beneficios de estas empresas han crecido significativamente, los pequeños granjeros luchan para preparar la próxima cosecha'.
De Schutter también se refirió a los biocombustibles, que -dijo-han sido uno de los principales factores para aumentar los precios de los alimentos y productos básicos.
Denunció que, desde 2004, todo el incremento de la producción de maíz en EEUU ha ido a la producción de bioetanol y que el 25 por ciento de los 13.100 millones de mazorcas producidas en EEUU en 2008 se dedicarán a esa producción.
También criticó el objetivo que se ha marcado la UE de que el transporte utilice en 2020 un 10 por ciento de biocombustibles.
'Estos objetivos no son realistas. Abandonándolos, enviaremos una fuerte señal al mercado de que el precio de los granos no seguirá creciendo indefinidamente', afirmó.
La especulación y la falta de infraestructuras en las zonas rurales de los países en desarrollo también fueron citadas por el relator, quien opinó que 'los fondos soberanos deben invertir en agricultura, especialmente en Africa', tal como propuso recientemente el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick.
La sesión extraordinaria fue convocada a petición de los No Alineados y de los países árabes e islámicos, y fue apoyada por 41 de los 47 países miembros.
Es la primera vez en los dos años de vida del nuevo CDH que se convoca una sesión especial sobre un asunto, y no sobre un país.