La transgenia animal
La transgenia animal puede ser una amenaza mayor que la vegetal
Un capítulo aparte en la artificialización
La manipulación genética de organismos vivos más conocida y combatida es la transgenia vegetal, los ya clásicos cultivos supuestamente resistentes a plagas, herbicidas ..... con finalidades “beneficiosas” y que según las corporaciones agroindustriales (Monsanto, Bayer, Syngenta, Pionner ....) llevaran a la humanidad a la felicidad y a la salud.
Pero hay una trangenia tanto o más inquietante que la vegetal: la transgenia animal. La transgenia animal ha estado, al menos hasta ahora, muy unida a la industria biofarmacéutica y se ha beneficiado del tabú i de la intocabilidad de todo lo vinculado a la medicina y al complejo tecnomédico. Un animal transgénico es lo mismo que un vegetal transgénico, un organismo al que se le ha añadido una parte de un genoma extraño, de un animal o de un vegetal. En la transgenia animal las contradicciones se agudizan al tratarse de vida sensible, especialmente cuando se habla de mamíferos transgénicos, más cercanos a nosotros (¿para cuando la transgenia humana? ....).
En estos momentos la “fabricación de animales transgénicos tiene 4 objetivos?
1.-Obtener modelos animales para la experimentación.
2.-Transganaderia para aumentar la productividad respecto a los sistemas pecuarios tradicionales (crecimiento más rápido, mayor, potenciar determinadas cualidades, aumentar la resistencia a las enfermedades....).
3.-El biopharming u obtención de productos especiales mediante la transgenia (generalmente substancias de interés farmacéutico).
4.-El xenotransplante.
1.-Modelos de experimentación:
La práctica totalidad de mamíferos transgénicos, ofrecidos en el mercado de “modelos animales” son los desdichados ratones de laboratorio, y últimamente el pez cebra (fácil de criar y con un ciclo vital corto), pero cada vez se modifican más especies animales (perros, ratas, conejos ....). Es un mercado muy rentable, el precio de un ratón knockout (con uno o más genes inactivados) en el mercado puede variar entre los cientos i los millares de euros, en el catálogo de precios (y productos) del Centro de Regulación Genòmica de Barcelona, una microinyección de pronúcleo (servicio básico) para un cliente privado cuesta 7.590,99 euros, y para uno público 3.795,49.
En España hay diversas empresas dedicadas a la lucrativa actividad de creación de modelos transgénicos, muchas de ellas de capital público, como el CEBATEG de la Universidad Autónoma de Barcelona, el Servicio de Experimentación Animal del Parque Científico de la Universidad de Barcelona, el Centro de Regulación Genómica del Parque Biomédico de Barcelona, El Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas de Madrid, Reproducción Animal del INIA de Madrid, Instituto de Biomedicina de Valencia, la Universidad de Sevilla .... Estos centros comercializan sobretodo ratones knockout y knockin y preparan, dinero mediante, cualquier animal transgénico a la medida del cliente. En España hay unos 17 centros públicos dedicados al desarrollo de modelos animales para la experimentación.
La producción de modelos animales transgénicos está también muy difundida en América del Sur. Por ejemplo los Bioterios de la UNAM en México, el del Centro de Ingeniaría Genética y Biotecnología la Habana, el de la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile (donde sueñan con lograr una tercera dentición en los humanos), en el Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable de Uruguay … en todos estos centros la producción de ratones transgénicos está consolidada, y en el instituto Milenio de Estudios Avanzados de la Universidad de Ñuñoa, también en Chile, trabajan con el pez cebra en la misma dirección.
2.-La transganaderia:
En estos momento no se acaban de difundir mamíferos transgénicos con finalidades agropecuarias (vacas que producen leche con más proteínas, por ejemplo), de momento el campo más “esperanzador” en este sentido es el de la piscicultura. La transgenia de los peces e invertebrados tiene la ventaja de que la fecundación y el desarrollo embrionario son, generalmente, externos y no es necesario implantar el zigoto en una hembra portadora, además tienen el ciclo vital más corto.
La acuicultura es un negocio en expansión, cada vez hay más variedad i calidad de peces criados en cautividad, también hay que decir que es un negocio sucio, extremadamente contaminante (ver sinó el caso de Chile, por citar uno) y con garantías de higiene alimentaria bajas (¿el próximo prion que entrará en el ciclo alimentario humano lo hará a través de un pez?).
Hay estudio avanzados de transgenia en peces de consumo humano en las especies siguientes: salmón, trucha, lubina, dorada, lenguado, tilapia, carpa, pez gato, abalón ... en total hay unos 17 proyectos (conocidos) en fase avanzada de desarrollo. Hay una variedad de salmón en espera de autorización para el consumo humano en EUA y Canadá y una tilapia también a la espera en Cuba.
El salmón que espera autorización en los EUA, que seguramente será el primer animal transgénico que entrará de una manera significativa en la cadena alimentaria humana, está modificado incorporándole un gen de la hormona del crecimiento y otro que codifica una proteína anticongelante del lenguado ártico (que a su vez estimula también la acción de la hormona del crecimiento). El resultado es un salmón que engorda el doble de rápido que las variedades naturales, incluso durante el invierno (período durante el que los salmones naturales prácticamente no crecen) y todo esto comiendo menos. El salmón transgénico tiene también una mejor adaptación a las aguas marinas. Este salmón, que tiene el nombre comercial de “AquAdvantage” será autorizado en breve por la FDA de los EUA, y, a partir de aquí, a la conquista del mundo.
La huida de animales transgénicos (huida imposible de evitar, todos los animales exóticos criados en cautividad acaban liberándose en el medio) puede tener consecuencias nefastas para la biodiversidad, como ya ha pasado con otros animales introducidos por el mercado, pensemos, por ejemplo, el impacto que puede tener un salmón que crece más rápido y durante todo el año sobre la población salvaje.
La transganaderia en España está centrada en la piscicultura, aunque la universidad de León está trabajando con material ovino. Hay diversos grupos que trabajan en el tema como el de Fisiología de los Peces de la UAB (lubina, dorada y trucha), el Centro de Biología Molecular de la Universidad de Málaga, el departamento de Biología Molecular de la universidad Miguel Hernandez (trucha, salmón y dorada), Departamento de Biotecnología del INIA (Trucha) …. El IRTA de la Generalitat de Cataluña lidera el proyecto PLEUROGENE para el lenguado, es un proyecto conjunto con Genome Canadá (que trabaja sobre Halibut) del lado español participan gran cantidad de instituciones, el CSIC y Universidades sobretodo de Andalucía y la empresa ORYZON GENOMICS, spinoff del Parc Científic de Barcelona.
3.-Biofarming:
El biofarming es un neologismo resultante de un juego de palabras en inglés, entre las palabras “farming” de “farm” granja y “pharming” de farmacia. Se refiere a la producción de substancias de interés farmacéutico mediante organismos transgénicos, vegetales cultivados (como el caso del maiz Staling) o animales de granja, sobretodo mamíferos y peces. El mercado de estas substancias, que actualmente se obtienen de organismos naturales no artificializados o de biorreactores, se sitúa en más de 20.000 millones de euros al año.
No es de extrañar pues que sea un campo cada vez más explorado, las empresas farmacéuticas invierten esfuerzos y dinero en ello. En estos momentos hay hembras de mamíferos transgénicos que producen leche con diversas substancias de interés económico, tanto para aplicación humana, como para otros animales, factores de coagulación, insulina, hormonas, vacunas …. Por ejemplo: a-1-antitripsina, proteína C, factores VIII i X de coagulación, antitrombina III …. Otro campo, el de producción de substancias de uso industrial, parece mucho más atrasado (tienen un valor añadido menor), pero indudablemente es solo cuestión de tiempo, así ya hay cabras que dan leche con proteína de tela de araña, gusanos de seda que tejen materiales extraños…
Con el biofarming el animal queda reducido al triste papel de birreactor, ya no es la relación de dominación domesticada de la ganadería convencional, sino la cosificación artificializada de un ser vivo, con la perspectiva de que más tarde o más temprano, esta cosificación nos atrapará también a los humanos. ¿No sería una especie de biofarming el uso de la terapia génica en el deporte de elite?, la finalidad no sería entonces obtener substancias, sino la obtención de espectáculo.
En el campo del biofarming en mamíferos solo tenemos datos de una notificación de utilización confinada al Ministerio del Medio Ambiente de España por parte de la multinacional Harlam Interfauna, para cerdos transgénicos modificados para sintetizar proteínas humanas en su fábrica de Sant Feliu de Codines (Barcelona). Hay diversos proyectos de biofarming en peces, el más importante está coordinada por el INIA, en el que participan la Universidad Miguel Hernandez de Alicante, el CSIC y la empresa Diver Drugs del Parque Científico de Barcelona, hay también un grupo de trabajo en este tema en la Universidad de Murcia (Grupo de Estudio de la inmunología de paces).
En el campo del biofarming Argentina tiene una posición puntera, de hecho es uno de los pocos países que trabaja con éxito en la clonación y transgenia de grandes rumiantes, concretamente la empresa Bio Sidus ha logrado clonar varios ejemplares de vaca con un gen de la Hormona Humana del Crecimiento que se expresa en la lecha (Pampa Mansa en el 2002, Pampa Mansa II y III en el 2004 y Pampero a finales del 2004). En Brasil, el Laboratorio de Reproduçao Animal de la Empresa Pública EMBRAPA ha logrado clonar un becerro.
4.-Xenotransplante:
Hay una última utilidad de transgenia con mamíferos, se trata de introducir genes humanos en otra especie animal para obtener tejidos y órganos para el xenotransplante (el principal candidato es el cerdo, por lo visto, muy parecido a nosotros). Entre otras posibilidades está la de introducir genes del receptor, o próximos a el, para disminuir el rechazo … por ejemplo, se “corrigen” los genes de un diabético, se produce un OGM con ellos y se hace un xenotransplante. Actualmente parece que, una buena parte de las expectativas puestas en el xenotransplante, se han trasladado al cultivo de las células madre, aunque en algunas reglamentaciones se considera xenotransplante la obtención de células clónicas madre por transferencia de un núcleo humano en un óvulo enucleado de otro animal.
El principal problema del xenotransplante, aparte del rechazo agudo, es la posibilidad de transferencia de patógenos animales a humanos, hay indicios, en algunos experimentos de infecciones de este tipo. De todos modos la totalidad de los xenotransplantes ensayados en humanos y primates han sido un fracaso y la supervivencia no ha superado nunca unas semanas y en la mayor parte solo unos pocos días. Hay un experimento reciente, efectuado en Mexico con adolescentes diabéticos (y suponemos que también pobres), a los que se les implantaron subcutáneamente células de páncreas porcino, aisladas en un dispositivo semipermeable, el éxito fue relativo, un 13% dejaron de necesitar insulina, un 52% disminuyeron su dependencia y un 35% siguieron igual.
PARA RECHAZAR LA ARTIFICIALIZACIÓN:
Ciertamente es imposible vivir al margen de la artificialización, ya que no es una cuestión elegible, sino impuesta. Por ejemplo se puede vigilar la alimentación, pero con un 50% de soja transgénica en el mundo (sin contar la no computada y las contaminaciones), la transgenia se impone …. Y lo mismo nos pasará con otras biotecnologías, cuando los compuestos obtenidos por biofarming invadan la medicina y la vida cotidiana, cuando se generalicen los alimentos/medicamento (nutracéuticos) ….
Cuando todas las nuevas tecnologías en desarrollo (nanocomputación, computación ubicua, RFID …) se unan a las biotecnologías y se incorporen a la identificación personal, al historial médico, a los instrumentos policiales, a la producción, incluida la agrícola, no habrá a donde huir, la imposición será un hecho.
Por otro lado las prácticas de “defensa del consumidor” quedan muy limitadas, ya hemos podido ver los resultados de la moratoria de la UE sobre los transgénicos. El recurso a nuevas investigaciones para garantizar la seguridad solo lleva a informes contradictorios y, siempre, los estados y las corporaciones irán por delante en este tema. De poco ha servido, por ejemplo, el informe del Panel Científico sobre OGM, promovido por el gobierno del Reino Unido, presentado a finales de octubre de 2003, y que es el estudio más largo sobre los efectos de los cultivos transgénicos, donde quedaba claro que la colza y la remolacha transgénica tenia efectos nocivos para la biodiversidad. Su valor, frente al apoyo ciego de la FAO, la OMS i otros organismos transnacionales ha sido prácticamente nulo.
No es suficiente rechazar la artificialización parcialmente, boicoteando algunos productos, no son útiles las moratorias …. El rechazo ha de ser global y comporta muchas otras cosas, es preciso destruir la lógica del sistema de dominación. Toda oposición a la artificialización ha de ser antiproductivista i antidesarrollista, toda oposición a la artificialización ha de ser contraria a la domesticación.
Cuando participamos en una propuesta, en una campaña, preparamos una actividad, cuando rechazamos un alimento transgénico o una práctica biotecnológica, siempre hemos de incluir el rechazo total a la artificialización, el rechazo al capitalismo, el rechazo al mercado, a los estados …. EL RECHAZO A LA CIVILIZACIÓN, LA DOMINACIÓN Y LA DOMESTICACIÓN. POR UN MUNDO LIBRE Y SALVAJE.
Llavors d’anarquia