Convocatoria de movilización frente a la OMC

En un comunicado, la Red Nuestro Mundo No Está a la Venta (OWINFS, por su sigla en inglés), con la adhesión de más de 20 organizaciones -entre ellas La Vía Campesina- convoca a la sociedad a realizar acciones que denuncien la política perjudicial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) por medio del Programa de la Ronda de Doha, lanzado en 2001. Entre los días 15 y 17 de diciembre, los Ministros de Economía se reunirán en Ginebra, Suiza, para la 8ª Conferencia Ministerial de la OMC.

Según la Red, el organismo internacional dificulta la circulación y la producción de alimentos, así como también disminuye fuentes de trabajo y desestabiliza el desarrollo de los países subdesarrollados.

Ante esto, la articulación exige normas comerciales que respalden la seguridad y la soberanía alimentaria, señalando que la volatilidad de los precios causa hambre y es resultado de una especulación excesiva en el mercado de commodities, así como de las normas alimentarias mundiales, que favorecen a los agronegociantes.

Entre los cambios sugeridos para revertir la situación, el comunicado exige que los países en desarrollo tengan derecho a aumentar los impuestos y usar otras medidas para proteger a sus agricultores y agricultoras, el desarrollo rural y la seguridad alimentaria.

Además, pide modificaciones de las normas comerciales apuntando a facilitar una "regulación adecuada” de las commodities, "a fin de evitar una especulación y volatilidad excesiva de los mercados mundiales”, explica.

En relación con las fuentes de trabajo y el espacio político para el desarrollo industrial, la Red destaca que la OMC crea desigualdades, a pesar de la crisis económica y financiera que afecta a todo el mundo, en grados diferenciados.

"No obstante, en lugar de priorizar la generación de empleo, el sistema normativo de la OMC está abocado a reducir los aranceles y obligar a los trabajadores a competir en condiciones desiguales, lo que conduce a una mayor destrucción de fuentes de trabajo, en lugar de usar el comercio para aumentar las tasas de empleo”, dice.

Para esto, la solución señalada por la Red sería utilizar el comercio para aumentar el empleo, al contrario de simplemente reducir tarifas; y no incluir ninguna cláusula contra la concentración, "ya que los países deben disponer de flexibilidad para proteger a los sectores vulnerables y que emplean mucha mano de obra”.

Otro punto destacado en el comunicado es el derecho a proteger el espacio político para el desarrollo. Por eso, exigen cambios en relación con el trato a los Países Menos Avanzados (PMA) -mejor dicho "empobrecidos"-: el paquete propuesto a este grupo debe incluir el acceso al mercado para las exportaciones y deben ser priorizadas las propuestas para garantizar un Trato Especial y Diferenciado (TED) para los países en desarrollo como aspecto clave para las negociaciones futuras.

Resistencia

En contraposición a las posiciones de la OMC, la Red Nuestro Mundo No Está a la Venta pide que organizaciones sociales realicen presión, a nivel nacional, sobre los Ministros de Economía y otras autoridades.

Son muchas las formas de hacerlo. Puede ser organizar eventos educativos y de prensa para concientizar a la población sobre los impactos negativos de la OMC, exigir una reunión con el Ministro de Economía de cada país para expresar demandas de cambios en el Programa de la Ronda de Doha y saber qué posicionamientos pretenden adoptar en la reunión en Ginebra.

Además, otras formas interesantes de ejercer presión sería contactar a parlamentarios y otros ministros e intentar sensibilizarlos, enviar una carta nacional al gobierno, con amplio apoyo de la esfera social y pautar la temática en los medios de comunicación, destacando los impactos negativos de la OMC en la economía y en los trabajadores.

Fuente: Baserri Bizia